
La violencia, homicidios y lesiones, en Guanajuato es crónica. Las estadísticas del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) indican que desde 1997 Guanajuato se encuentra entre los 10 estados más violentos, a partir del año 2005 se encuentra entre los 5 estados más violentos, en 2017 ocupó el tercer lugar nacional, y en los años 2018 y 2019 ocupa el segundo lugar nacional. Específicamente, en materia de homicidios, en 2015 y 2016 Guanajuato ocupó el tercer lugar nacional, en los siguientes años los homicidios incrementaron al grado que, en 2017, 2018 y 2019 Guanajuato ocupa el primer lugar nacional en homicidios.
La inseguridad, es decir la comisión de todo tipo de delitos, también es crónica, conforme a las estadísticas del SESNSP, desde el año 2000 Guanajuato se encuentra entre los 10 estados con mayor número de delitos, durante ese periodo ocupó el cuarto lugar nacional en 9 años distintos.
El PAN gobierna Guanajuato desde el 3 de noviembre de 1991, a partir de entonces la inseguridad en Guanajuato ha crecido de forma sostenida.

La violencia (lesiones y homicidios) crece sostenidamente.

Los homicidios crecen sostenidamente.

Las cifras muestran que a los gobiernos del PAN no le interesa la seguridad del pueblo guanajuantense, que durante sus gobiernos la inseguridad ha crecido y los grupos delincuenciales se han fortalecidos.
Los gobiernos del PAN han fracasado en brindar seguridad. Es momento de iniciar un cambio democrático, mediante la construcción de un polo político que defienda los intereses de los trabajadores y trabajadoras guanajuatenses, que ponga al centro la seguridad, el goce pleno de derechos laborales y sociales, salarios y prestaciones dignos para todas las personas.
¡Los gobiernos deben estar al servicio de los derechos laborales y sociales de las personas, no al servicio de las ganancias de las élites empresariales nacionales y extranjeras!